Limitandome a ser yo misma.

domingo, 29 de agosto de 2010


Amélie no es una chica como las demás. Ha visto a su pez de colores deslizarse hacia las alcantarillas municipales, a su madre morir en la plaza de Notre-Dame y a su padre dedicar todo su afecto a un gnomo de jardín.

Creció y se convirtió en camarera en un bar de Montmartre cuya propietaria es una antigua jinete circense. la vida de Amelie es sencilla: le gusta tirar piedras al Sena, observar a la gente y dejar volar su imaginación. De repente, a sus veintidós años, Amélie descubre su objetivo en la vida: arreglar la vida de los demás.



Sé buscar las pequeñas cosas de la vida, ver aquellos detalles que nadie más sabe ver, estoy hecha de sueños y por más empeño que ponga en concebirlo,no me es posible ni tan siquiera imaginar,que pueda hacerse el amor más que volando.


1 comentario: